Letizia y el rosa, un romance a fuego lento

Letizia no solo se ha convertido en una de las royals más queridas de la realeza europea, sino también en un auténtico icono de estilo. Desde que se estrenase en la Corona, han sido muchos los estilismos que han pasado por su vestidor, siendo algunos muy criticados y otros, en cambio, de lo más aplaudidos. Sin embargo, en estos últimos años, la mujer de Felipe VI ha decidido apostar por la tendencia de arriesgar. Así, son muchos los colores que ha lucido, entre los que se encuentra el rosa, con quien comparte un romance a fuego lento pero ya casi cuajado.

La última vez que la monarca se ha dejado ver enfundada en un look rosa ha sido durante su viaje oficial al África Subsahariana. Al aterrizar en Luanda, la madre de Leonor y Sofía sorprendió con un dos piezas en rosa pastel con el que adelantó cuál sería uno de los colores de la temporada. Y esta no ha sido la única ocasión pues, tan solo unos días antes, Letizia sacó su lado más dulce y romántico en una de las citas más esperadas del año. Para acompañar al Rey en la tradicional recepción al Cuerpo Diplomático en el Palacio Real de Madrid, la monarca escogió una falda de gasa color rosa bebé y una blusa de seda blanca con lazada. Y es que, a diferencia de la Pascua Militar, en esta ocasión la Reina deja a un lado los tonos oscuros para sacar su lado más alegre.

Asimismo, para aterrizar en Angola, Letizia volvió a apostar por el rosa con un vestido fucsia firmado por Moisés Nieto. Un éxito que tuvo un porqué -o, mejor, dicho varios-. Son muchas las referencias al rosa que se pueden encontrar en este país, como la fachada rosa de la sede del Banco Nacional; las rosas de porcelana que son uno de los símbolos del país; la Rosa de Lulo, el diamante rosa más grande encontrado en los últimos tres siglos; o la moneda oficial del país, kwanza, que también es de color rosa en su billete de 1.000.

Su pasión por el rosa 

Su reinado como soberana de España ha estado marcado por el color blanco, su gran aliado y con el que comenzó el día de su pedida de mano, y el rojo, el otro amor de su vida. No obstante, el rosa ha ido cogiendo protagonismo hasta convertirse en una de las tonalidades que más destaca de su vestidor, eso sí, solo lo usa en ocasiones muy puntuales. Letizia ha descubierto en este color un mejor amigo y en sus versiones fucsia y empolvado sus aliados.

Son muchas las ocasiones en las que ha escogido este color, como el vestido largo de gala con motivos florales de Carolina Herrera que llevó en la Entronización del Emperador de Japón en Tokio o el que lució en la boda del Príncipe Guillermo y Kate Middleton, siendo una de las invitadas más aplaudidas del enlace. Y es que, la elección de esta tonalidad, además de porque es un color romántico, versátil y que rejuvenece, también podría tener un motivo regio pues, desde hace ya muchos años, el fucsia se ha vinculado a la realeza.